La Confederación Española de Agrupaciones de Familiares y Personas con Enfermedad Mental (FEAFES) quiere recordar en vísperas de la celebración del Día Universal del Niño, el 20 de noviembre, que en España solo una quinta parte de los menores con un problema de salud mental son tratados adecuadamente.
La Declaración de los Derechos del Niño contempla que la protección de la salud infantil debe tener en cuenta también los aspectos mentales. En base a este mandato y en vísperas de la celebración del Día Universal del Niño, el próximo 20 de noviembre, el presidente de la Confederación Española de Agrupaciones de Familiares y Personas con Enfermedad Mental (FEAFES), Jose María Sánchez Monge, quiere recordar la importancia de la detección y adecuado tratamiento de estos trastornos, que solo en una quinta parte de los menores que los presentan en España son tratados adecuadamente.
La detección de un problema de salud mental y el inicio de un tratamiento adecuado “lo antes posible” resultan fundamentales no solo para el momento presente de los niños y niñas, sino también para el desarrollo de ese trastorno en la edad adulta, señala Sánchez Monge. En España entre un 10 y un 20% de los menores presentan algún tipo de trastorno mental, según datos del Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad, pero no todos reciben el tratamiento adecuado.
Desde FEAFES se recuerda que “en demasiadas ocasiones los trastornos mentales en niños y adolescentes se consideran problemas de carácter o de educación”. esas ideas impiden el diagnóstico, el inicio del tratamiento, y por tanto cualquier mejora en la situación de esas familias, como explica esta plataforma, que reúne a 285 asociaciones de personas con enfermedad mental y familiares. Esta situación, unida a que la atención a este grupo de población supone “una de las principales carencias de nuestro sistema social y sanitario”, según el presidente de FEAFES, lleva a las agrupaciones de familiares a reclamar “la máxima implicación y coordinación” entre los sectores sanitarios, sociales y educativos.
Mitigar los efectos
Aludiendo a los datos recogidos en el informe de Unicef (Fondo de Naciones Unidas para la Infancia) ‘Estado Mundial de la Infancia 2011’, FEAFES señala que el reconocimiento temprano de desarreglos emocionales y la prestación de ayuda psicológica a cargo de personal especializado pueden mitigar los efectos de los problemas mentales. Unicef recuerda además que el apoyo a la salud mental, su prevención y un tratamiento oportuno reducen la carga que pesa sobre los sistemas de atención sanitaria.
El estudio de Unicef recoge datos como el incremento de la prevalencia de trastornos mentales entre los adolescentes en los últimos 30 años, que además ahora comienzan antes de los 14 años, o que el 20% de los adolescentes de todo el mundo tiene problemas mentales o de comportamiento. El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia constata además que la depresión es una de las enfermedades más frecuentes, a nivel mundial de morbilidad, entre los jóvenes de 15 a 19 años de edad.
Unicef identifica los problemas de salud mental en los jóvenes como un importante reto para la salud pública de todo el mundo y recuerda que el estigma dirigido hacia los jóvenes con trastornos mentales, y las violaciones de los derechos humanos a las que están sometidos, aumentan las consecuencias adversas de esos problemas de salud mental. El informe recuerda además que los problemas de salud mental de los adolescentes acarrean unos altos costes sociales y económicos ya que, conforme pasa el tiempo, suelen sufrir discapacidades. “Las medidas preventivas pueden ayudar a evitar el agravamiento y la progresión de los trastornos mentales, y una pronta intervención limita la gravedad de los mismos”, concluye Unicef.
Aspectos como la ruptura de las estructuras familiares, al aumento del desempleo entre los jóvenes y las aspiraciones educativas y profesionales poco realistas que las familias tienen para sus hijos e hijas se identifican como desencadenantes de problemas de salud mental que han hecho que se incremente en las tres últimas décadas el número de menores de 14 años que los presentan. Se presentan además como factores de riesgo de esos problemas de salud mental los malos tratos en la infancia; la violencia en la familia, la escuela y el vecindario; la pobreza; la exclusión social y la desventaja en materia de enseñanza.
Fuentes: OED
Fecha:18/11/2011